Formar egresados universitarios con habilidades para la alta dirección implica proporcionarles una combinación de conocimientos, habilidades y experiencias que los preparen para liderar de manera efectiva en entornos empresariales complejos y dinámicos.
Es importante mantener un enfoque en la educación ejecutiva diseñando programas educativos que incluyan cursos específicos sobre liderazgo, gestión estratégica, toma de decisiones, gestión del cambio y habilidades de comunicación efectiva. Estos cursos deben ofrecer una comprensión profunda de los principios y prácticas de la alta dirección. De igual manera Incorporar oportunidades de aprendizaje experiencial, como estudios de caso, simulaciones empresariales y pasantías, donde los estudiantes puedan aplicar los conceptos teóricos en situaciones prácticas del mundo real. Esto les permitirá desarrollar habilidades de resolución de problemas y toma de decisiones bajo presión.
Una Mentoría y coaching proporcionaría oportunidades para que los estudiantes sean mentoreados y reciban coaching personalizado de profesionales experimentados en alta dirección. Esto les permitirá recibir orientación y retroalimentación específica sobre su desarrollo profesional y liderazgo.
Considero que, al combinar estos enfoques, las universidades pueden formar egresados con las habilidades necesarias para tener éxito en roles de alta dirección en una amplia gama de industrias y organizaciones. Es importante que el plan de estudios y las experiencias educativas estén en constante evolución para adaptarse a las cambiantes demandas del entorno empresarial.
Me parece que la propuesta de Mentoría y Coaching puede tener excelentes resultados en los estudiantes; en el caso de las Universidades Tecnológicas la posibilidad de que los estudiantes tengan una estadía al término del Técnico Superior Universitario y por segunda vez al finalizar la licenciatura/ingeniería facilita su ingreso al mercado laboral.
Otra opción es el desarrollo de un sistema Dual a través de la cual los estudiantes reciben, de manera alternada, formación teórica en los planteles educativos y formación práctica en las empresas, con la finalidad de facilitar la inserción de los egresados, que así lo deseen, en el ámbito laboral (SITEAL)
Sin embargo podemos mencionar varias opciones de solución, retomando el desarrollo de materias encaminadas a la detección y desarrollo de habilidades para la alta dirección, en mi experiencia considero que aunque dentro de los programas educativos este tipo de materias sí existen, no se les da el tiempo suficiente para una correcta aplicación, por lo cual la mayoría de las veces se termina viendo la teoría y no la aplicación o importancia en la vida laboral.
Entonces será necesario analizar las cargas horarias, con la posibilidad de extender el tiempo de estas materias ya sea presencial o de forma virtual, llevando a los alumnos a simulaciones, cursos o talleres.
